Decía en el anterior post que la revolución está en marcha y las posiciones, enfrentadas.
El nuevo régimen está dispuesto a pasar por encima del viejo debido a la propia dinámica que la tecnología le imprime y por los intereses que nacen de grandes operadores de servicios digitales.
¿Quiénes componen el nuevo régimen? Grandes empresas que ofrecen todo tipo de soportes digitales, arropados por millones de usuarios cuya vocación literaria ha encontrado una vía de expresión. No son un colectivo homogéneo, sino abigarrado, pero les une un deseo de romper jerarquías, de expresarse sin cortapisas, de lograr visibilidad, de conseguir que su voz tenga relevancia en el contexto literario [y las empresas, de hacer mucho dinero con poco esfuerzo]. Están dirigidos por ciertos gurús digitales que les iluminan y marcan los objetivos a seguir [y que, como en todas la revoluciones, se aprovechan de ellos].
Pero vayamos a los fundamentos del nuevo régimen:
- Quiere tomar el poder y demostrar que son tan legítimos, o más, que los anteriores mandamases.
- Desprecia a la aristocracia por obsoleta y falsa [demasiado escritor y crítico de salón con pajarita].
- Cree en el caos como nuevo paradigma [el orden sólo sirve para controlar y jerarquizar].
- Disiente que el papel sea la única vía literaria [los ebooks son la nueva esencia cultural por sus posibilidades integradoras].
- Pone al lector en el centro de su existencia, guillotinando sistemáticamente a los editores y críticos literarios por su falta de ética.
¿Cuáles son los pecados de este régimen inmaduro y lleno de aficionados?
- Querer ocupar el sillón de los anteriores, más que desarrollar un nuevo escenario literario.
¿Quiénes componen el nuevo régimen? Grandes empresas que ofrecen todo tipo de soportes digitales, arropados por millones de usuarios cuya vocación literaria ha encontrado una vía de expresión. No son un colectivo homogéneo, sino abigarrado, pero les une un deseo de romper jerarquías, de expresarse sin cortapisas, de lograr visibilidad, de conseguir que su voz tenga relevancia en el contexto literario [y las empresas, de hacer mucho dinero con poco esfuerzo]. Están dirigidos por ciertos gurús digitales que les iluminan y marcan los objetivos a seguir [y que, como en todas la revoluciones, se aprovechan de ellos].
Pero vayamos a los fundamentos del nuevo régimen:
- Quiere tomar el poder y demostrar que son tan legítimos, o más, que los anteriores mandamases.
- Desprecia a la aristocracia por obsoleta y falsa [demasiado escritor y crítico de salón con pajarita].
- Cree en el caos como nuevo paradigma [el orden sólo sirve para controlar y jerarquizar].
- Disiente que el papel sea la única vía literaria [los ebooks son la nueva esencia cultural por sus posibilidades integradoras].
- Pone al lector en el centro de su existencia, guillotinando sistemáticamente a los editores y críticos literarios por su falta de ética.
¿Cuáles son los pecados de este régimen inmaduro y lleno de aficionados?
- Querer ocupar el sillón de los anteriores, más que desarrollar un nuevo escenario literario.
- Seguir adorando el papel, aunque no lo reconozcan, como un blasón de nobleza.
- Desear ser reconocido por los grandes medios de comunicación del antiguo régimen.
- Destruir el antiguo modelo de negocio sin saber crear uno nuevo.
- Permitir la piratería como una causa noble basada en algún derecho democrático.
- Igualar toda la literatura por el hecho de serla, como si no hubiera categorías y calidades.
- Permitir la piratería como una causa noble basada en algún derecho democrático.
- Igualar toda la literatura por el hecho de serla, como si no hubiera categorías y calidades.
- Permitir gurús cuyo comportamiento es igual que los aristócratas del antiguo régimen.
Hola Gonzalo. Soy un adepto del nuevo régimen y a pesar de ese deje despectivo que usas estoy de acuerdo en casi todos los puntos, tanto en los fundamentos como en los pecados, solo que yo lo valoro positivamente.
ResponderEliminarSolo un par de matices, no creo que nosotros estemos destruyendo nada, es como si ante un cambio climático acusáramos a las nuevas especies de destruir a las viejas. Y sí, es verdad, no tenemos ni idea de como crear ese nuevo modelo de negocio, ojalá pudiera llevarte la contraria en este punto, pero no, nos faltan 500 años de experiencia. Es lo que hay, ensayo y error, y en eso estamos.
Luego sobre la calidad: aun que me joden los gurús, tanto los nuevos como los viejos, desgraciadamente son los que marcan los estándares de calidad, por que si no, si no aceptamos la autoridad de un fórum para decidir que es bueno y que no, solo nos queda nuestro propio gusto y el ranking de ventas. Yo, hoy por hoy, prefiero no hacerles mucho caso, ni a los nuevos ni a los viejos, mas que nada por que ellos no me hacen caso a mí. Si mañana resulta que me leen y le ponen a mis libros la etiqueta de calidad, igual cambio de opinión y empiezo a hablar despectivamente de los que no se encuentren en tan selecto grupo, pero por ahora me encuentro en el lado de los parias literarios, que le vamos a hacer.
Y por último, es imposible impedir la piratería sin vigilar todas y cada una de las comunicaciones entre las personas, cosa que me parece viola algún que otro derecho democrático. Así que emitir juicios de valor al respecto es tan inútil como hacerlo sobre el tiempo, es algo que está aquí para quedarse y habrá que encontrar la manera de usarlo en nuestro beneficio si queremos sobrevivir.
Ah, y felicidades por el blog, lo seguiré.
Gracias, Vicente. Tienes mucha razón. Mi intención no es posicionarme, sino aflorar desde un punto de vista desenfadado las inconsecuencias de cada uno de lor "regímenes". Ambos tienen virtudes y defectos. Saludos
ResponderEliminarYo creo que, sobre todo, lo que tienen en común estos dos "regímenes" es su absoluta y total falta de originalidad. Siempre ha habido escritores nuevos y viejas glorias, siempre ha habido aspirantes a escritores que, no publicando, hablaban de la incompetencia de los editores (evidentemente es mucho mejor para el ego, cuando no eres publicado, decidir que es culpa del editor incompetente que no quiere apostar por ti que afrontar que quizá lo que escribes no sea publicable). Y nunca ha habido mayor problema en seguir publicando libros que no necesariamente tengan que ser de, digamos, Antonio Muñoz Molina o la tipa de Harry Potter, y pienso en Casavella, que nunca fue precisamente de la nobleca literaria, y en mí mismo, que ya ves. El resto, la dicotomía entre la modernidad de internet y la antigüedad del mundo editorial actual, es mero complemento circunstancial que en realidad pinta menos de lo que parece (cosa que quienes menos ven, por cierto, son los del mundo editorial, editando basura, viendo caer las ventas y echándole la culpa a las descargas de internet).
ResponderEliminarCon lo que sí que estoy de acuerdo es con lo de la veneración al papel. Aunque no pude asistir a todos los paneles del EBL, me pareció la mar de curioso que mientras que todo el mundo reivindicaba el papel (con perdón) del no-papel, del "nuevo medio", todo el mundo hablaba de libros escritos en papel. Y bueno, hasta G&R está saltando al papel escrito, y no creo que por ello haya que descalificarlas o que vayan a aborrecerse a sí mismas. Todo eso a mí me hace pensar que el problema no es, realmente, blogs e internet contra el establishment editorial y sus rinconcillos, sino independencia versus corporativismo. Lo que tiene de malo Babelia, en realidad, no es que sea en papel y venga con un periódico, sino que para saber si una novela de Anagrama es buena o no no nos sirve, porque es del grupo, y la van a poner bien.
Hola, Gonzalo. Estuve en el encuentro la semana pasada y por falta de tiempo no he podido escribir nada acerca de las conclusiones que saqué. En primer lugar, mi enhorabuena, fue muy interesante; y en segundo, desde mi punto de vista, faltó sangre nueva, gente aún más joven. Algunos llevamos publicando en diferentes blogs desde que teníamos 15 años. Es decir, nuestras primeras historias, esas que no valen ni un duro, en lugar de quedarse en un papel, olvidado en algún cuaderno, han salido a la luz y han llegado a otras personas, que por ser mejores o por tener más experiencia, nos han corregido, nos han hecho crecer, y han sido personas de nuestra edad o con un par de años más, tampoco un escritor consagrado y de muy difícil acceso. Creo que es muy positivo que todo el mundo pueda publicar. Luego, el escribir bien, el tener buenas ideas, el conectar, el tiempo o incluso el marketing harán que esa persona sea reconocido o no, llegue a más o menos gente.
ResponderEliminarYo ya veo Internet como una forma de legitimar a un escritor. Ya hay historias, con muchísimos capítulos, escritas sólo en blogs; bien es cierto que, desafortunadamente, luego pasan al papel... Y ése puede ser el error: considerar el blog como un salto hacia el papel. Yo veo esta revolución en la red como una vuelta a la publicación de novelas por entrega pero con un control total por parte del escritor. Creo que estamos volviendo a ese modelo del siglo XVII y XIX en donde los periódicos estaban llenos de opinión y análisis acompañados de poesías y relatos, pero renovado, un 2.0 de los periódicos antiguos, más accesible, con feed-back, con una gama de posibilidades increíble... Así que, ¿Por qué no comenzar a ver el blog como un fin en sí mismo? ¿Por qué no empezar a ver que esto, tal y como está, es un nuevo modelo?
¡Un saludo!
David, compartimos más que disentimos. El corporativismo, cualquiera que sea su raiz, es nefasto para la creación porque tiende a crear tribus, a fomentar el conformismo, a empobrecer. Saludos
ResponderEliminarElena, yo soy defensor del blog como un ente propio, abierto al mundo, donde los escritores (profesionales o no) introducimos nuestras ideas, experiencias, críticas o creaciones con afán de compartir/trascender de alguna forma. Si a eso le sumas aspectos de visibilidad, marketing, etc. pues mejor que mejor. Todos queremos ser reconocidos. Saludos
ResponderEliminarQué lástima, Gonzalo, ¡con lo que a mí me gusta estar en contra, y lo difícil que me lo pones!
ResponderEliminarOtra vez será.
ResponderEliminarHola Gonzalo, llegué a tu blog a través de Twitter. Creo que puedo hablar con cierta propiedad acerca de la publicación pues he sido publicada por editoriales regulares (Roca y Viceversa) y también he podido autopublicar en Amazon por mi cuenta, debido a que mis novelas para el 2008 y 2009, cuando se publicaron en papel, no tenían contemplado en el contrato los derechos digitales.
ResponderEliminarMe lancé a la aventura "indie" y no me arrepiento. No cuento el año 2010 como fracaso editorial porque estuve tratando de salvar la vida a mi marido; finalmente el cáncer ganó la batalla y yo regresé al ruedo literario en el 2011.
La primera opción para publicar una nueva novela siempre la tiene la editorial que te publicó anteriormente, así que mi agente presentó una novela que tenía acabada a Viceversa y ellos la rechazaron, argumentando la crisis editorial por la que atravesaba España.
Publiqué también esa novela en Amazon: "El manuscrito 1 El secreto", cuando todavía no estaba esa plataforma en España y las ventas se fueron hacia arriba. ¿Por qué? no lo sabría decir con exactitud. No me creo una excelente escritora, sé que las hay mucho mejores y no soy nadie para echarme flores y darme autobombo. Lo cierto es que para cuando Amazon se instaló en España mi novela El manuscrito vendió el triple que en USA.
El resultado fue que ahora publico "El manuscrito" por Ediciones B bajo el sello B de Books y en mayo saldrá la versión impresa.
¿Qué se puede sacar en conclusión de todo lo que acabo de decir?
Que si bien no sabemos exactamente cómo se maneja el negocio de la autopublicación, hay un gran número de escritores que, al igual que yo fueron rechazados por editoriales y se atrevieron a decir: ¡basta! Ahora seré yo quien tenga el control en mis manos. No porque odien o estén en contra del papel. Es porque no tienen oportunidades de publicar en papel con la garantía de una buena edición, una portada acorde al contenido y un adelanto de regalías.
Estoy segura de que la mayoría que hoy publica en Amazon (lo menciono porque es el que lleva la batuta) desea ser descubierto por una editorial, y de hecho, está sucediendo.
Lo bueno de publicar en esa plataforma es que da notoriedad y es una plataforma de lanzamiento internacional. Mis libros han sido leídos en los lugares más remotos que te puedas imaginar. He recibido cartas de las Islas Galápagos, con eso te digo todo. Basta que la persona tenga acceso a un ordenador o a un Kindle o lector electrónico y tendrá al alcance de un clic cualquier novela que desee leer, cosa que no ocurre con la mayoría de las editoriales, que luego de publicarte si pasados dos meses tu libro no se convierte en un boom, te abandonan a tu suerte. Me sucedió dos veces. Mientras que en Amazon y ahora con B de Books tenemos la ventaja de seguir publicando en ese portal y en todos las demás tiendas digitales como Grammata, Popular E-Books, La Casa del Libro, FNAC, y otros tantos sitios, y al ser ellos una empresa transnacional, hay garantía de una distribución en papel en muchos países.
¿Cómo lo logré? autopublicándome en Amazon.
Viceversa también tiene buena distribución, El legado se vendió en Sudamérica y México, pero le faltó el empuje que esta gente nueva del sello digital tiene porque se dieron cuenta que no todo es fichar y publicar a un escritor, hace falta apoyarlo a lo largo de su carrera.
Disculpa por haberme extendido tanto, pero quería explicarte mi posición.
Un saludo,
Blanca Miosi
Gracias, Blanca. Lo que está claro es que hay que luchar con todas tus fuerzas por los sueños literarios. Es la única forma. Lo de menos es cómo. Saludos.
ResponderEliminarHola Gonzalo. Nos hemos topado de casualidad con tu blog tras clickear en centenares de enlaces en busca de blogs especializados en literatura de ensayo. Obviamente este no es un ejemplo, sin embargo nos ha llamado bastante la atención. Nosotros somos una editorial recién nacida, y ya estamos empapándonos de lo dificil que es crearte un público, aunque te conformes con una difusión muy limitada, o aunque publiques libros de candidatos al Nobel (que no es el caso, de momento). Y más dificil aún se hace cuando solo quieres dedicarte a editar literatura crítica.
ResponderEliminarLa verdad que en este post defines muy bien cuales van a ser los derroteros del sector en un futuro no demasiado lejano. En un momento dado, viendo que podíamos instalar nuestro chiringuito editorial dentro de algún resquicio de lo que tu denominas "nuevo régimen", se nos ocurrió echar adelante la idea viendo que muchos compañeros y conocidos tenían algo que decir y ningún sitio donde publicarlo. Nos liamos la manta a la cabeza, y hala, Cisma Editorial al canto. "Como mínimo consigamos que nos lean colegas de colegas", pensamos. Pero echarle tantas horas a un proyecto para que solo te lean amigos resulta demasiado frustrante, por lo que nos vemos ahora con el trajín de promocionarnos en el desconocido (hasta ahora) mundo de los blogs. Al margen de vender tu alma al diablo como escritor a alguna editorial del establishment, o de la aventura de la autopublicación, nosotros queremos proponer un modelo de publicación de autores críticos amateur porque pensamos que, ahora más que nunca, cualquier argumento con un mínimo de calidad merece ponerse al alcance del público, aunque éste sea reducido. Al fin y al cabo, por algo se empieza. Y, sirviéndonos de tu generosidad, nos gustaria saber que opinión te merece el proyecto. Para finalizar la parrafada, mis felicitaciones por el post y por el blog en general, que está muy chulo.
Un saludo
Cisma Editorial
(excusándonos de nuevo por la promo gratuita, http://cismaeditorial.wordpress.com)
Estimado amigo/a de Cisma Editorial, me encanta escuchar vuestras ideas y propuestas. Creo que estamos en un momento de oportunidad para los nuevos proyectos editoriales que sepan buscar su sitio en el mercado y sean profesionales. En este sentido, sólo puedo animaros a comprender las nuevas tendencias y a jugar con las nuevas reglas. Si os parece, os doy la referencia de SINERRATA, una editorial joven que lo está haciendo bien. Seguirle la pista. Es gente muy abierta. Saludos
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