lunes, 26 de septiembre de 2011

Cartas a un joven novelista, de Mario Vargas Llosa

Vargas Llosa es el caballero de las letras hispanas. Diría que es el último caballero (tan escasos, por cierto). Y lo demuestra en su actitud vital, además de literaria. El autor peruano no sólo escribe bien sino que quiere que los demás lo hagan, aspecto nada fácil dada la deriva de nuestros narradores contemporáneos. Para ello dedica 136 páginas a ofrecer consejos a un joven escritor imaginario como anteriormente lo hizo Rilke. Son consejos serios en donde nos avisa de que "la ficción es una mentira que recubre una profunda verdad", que el "novelista no elige sus temas; es elegido por ellos" o que "un tema de por sí no es nunca bueno ni malo en literatura". Pero también nos ofrece su visión sobre la necesidad de persuadir al lector, es decir de "acortar la distancia que separa la ficción de la realidad y, borrando esa frontera, hacer vivir al lector aquella mentira como si fuera la más imperecedera verdad...". Imagino que Vargas Llosa no tiene excesivo aprecio a los postmodernos o a los metaliterarios recalcitrantes (y demás tribus urbanas) que se ciscan en la persuasión sin ningún remordimiento.
Cartas a un joven novelista es, por tanto, un libro de los que se disfrutan desde la primera a la última página por su sinceridad y por ofrecer una visión generosa de la literatura, aunque algo clásica. Es más, es un buen libro aun cuando se sepa que no va a ser leído por los jóvenes escritores –no leen nada que condicione su creatividad– y que tendremos que ser los viejos escritores –de vuelta ya de muchas tonterías– los que lo apreciemos.
Ultimo consejo del Premio Nobel "... quien ve en el éxito el estímulo esencial de su vocación es probable que vea frustrado su sueño y confunda la vocación literaria con la vocación por el relumbrón y los beneficios económicos que a ciertos escritores (muy contados) depara la literatura. Ambas cosas son distintas". Aviso para navegantes poco espabilados.


Cartas a un joven novelista
Mario Vargas Llosa
Editorial Alfaguara
Págs. 136

7 comentarios:

  1. No sé si leíste su discurso cuando recogió el premio Novel de literatura, toda una lección de humanidad y pasión. Nunca leí algo suyo, pero ese discurso es algo que intento no olvidar.
    No leí Cartas a un joven novelista, porque no lo encontré pero lo tengo pendiente. Leí Mientras escribo de Stephen King y lo disfruté muchísimo, viene a ser una biografía novelada; me encantó.
    Saludos

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  2. Sí, fue un discurso emocionante. La verdad es que el libro merece la pena y se lee fácil. He oído hablar muy bien de Mientras escribo. Lo pondré en mi lista. Saludos.

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  3. Este no es un libro para criticar sobre si está bien escrito o no. Y creo que ese es su principal acierto. Más que sus "consejos" para escribir lo que más valioso me parece es esa disección estructral sobre las formas y modos de la novela a la hora de confeccionar una buena ficcion. Me gusta esa defición de universalidad de lo contado como fin a alcanzar u objetivo de una buena ficción. Se lo recomendé a varios amigos pero antes les pedi que leyeran ciertas novelas que MVLL cita ya que suelta en "spoilers" (termino televisivo que uso aqui aunque sea incongruente.
    enhorabuena por el blog

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  4. Es un libro generoso, y por eso me gusta. Gracias. Saludos.

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  5. Qué ganas de leerlo. Todavía no ha llegado a mis manos pero espero pronto poder hojearlo. Vargas Llosa para mí es un ídolo, mi único ídolo peruano, debo reconocer. Pocos escritores tienen la "bondad" de mostrar al resto sus técnicas y aconsejar sobre algo tan personal como la escritura.
    Muchos saludos desde Chile!

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  6. Se agradece este gesto de bondad del maestro Vargas Llosa. Me encanta este libro y comparto mucho de lo que allí se dice.

    G. Bielefeldt
    Escritor chileno

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